Descripción Fujica Drive (1964)

Fujica Drive (1964)

Siempre hambrienta.

Las cámaras de medio cuadro son un concepto universalmente exitoso, y decididamente encantador. Concebidas para ir a todas partes, y fotografiarlo todo sin considerar el gasto de película, parecen estimular el dedo índice de su fotógrafo. Dicho de otra forma, son al mismo tiempo gentiles y voraces, siempre hambrientas del próximo fotograma. 

Y ninguna de ellas tan hambrienta como la Fujica Drive, que al igual que su contemporánea, la Canon Dial, posee un avance automático.

¿Avance automático, en una medio cuadro de los ´60?

Así es. La respuesta es tan simple como ingeniosa: se trata de un mecanismo de cuerda. Una vez cargada, se puede realizar una docena de imágenes en rápida sucesión, lo que es fantástico para fotografiar bailarines, actividades deportivas o, simplemente, todo aquello en la vida que sucede demasiado rápido como para esperar.

Por lo demás, es idéntica a una Fujica Half, y luce el mismo soberbio 28mm f2.8 de cinco elementos, secreto de su excelente resultado.

Originalmente concebidas para funcionar con exposición automática, ambos modelos contaban con un fotómetro de selenio, que invariablemente se descomponía. Este ejemplar no es la excepción.

Más allá de este talón de Aquiles, cuenta afortunadamente con un sistema de exposición completamente manual, que funciona de maravilla, y permite un control preciso sobre la imagen. 

Una de las medio cuadro más interesantes que se hayan fabricado, la Fujica Drive combina la calidad de un lente soberbio con la velocidad del avance automático. Es particularmente divertida, sobre todo, para tomar pequeñas secuencias de acción, y hacer con ellas un stop motion.

Además, luego de usarla un rato, uno se comienza a dar cuenta que 72 fotogramas no duran tanto.

– Lente: 28mm f2.8 (5 elementos). 

– Exposición Manual. Vel obt 1/30 – 1/300seg +.

– Enfoque manual. Dist. mínima 0.6mts.

– Fotómetro de selenio agotado (SIN exposición automática)

– Rosca portafiltros 22.5mm.